"Es la conclusión ante la negativa del FBI y la CIA de entregar los documentos en su poder relacionados con la muerte de mi padre", dijo el joven a Prensa Latina en un aparte de los actos conmemorativos de la trágica fecha en el cementerio municipal de San Juan, con la asistencia de familiares, amigos y antiguos compañeros de lucha.
Añadió que por primera vez se ha establecido que la CIA tiene en su poder documentos relacionados con la trama contra el activista de 26 años de edad, muerto al volante de su auto cerca de la residencia de su madre en Guaynabo, en la periferia de San Juan.
"Nosotros solicitamos que nos entregaran los documentos en su poder y la respuesta de la CIA fue la negativa, alegando razones de seguridad de Estados Unidos", explicó.
De este modo, dijo Muñiz Pérez, quedó confirmada la sospecha de que agencias de seguridad de Estados Unidos tuvieron alguna relación con la conspiración criminal.
Muñiz Varela fue asesinado por un comando de terroristas de la ultraderecha cubana que operaba al amparo de policías puertorriqueños bajo el mando del coronel Alejo Maldonado, quien después cumplió cárcel y confesó su participación en más de una docena de asesinatos.
"Nos proponemos pedirle a la recién nombrada secretaria de Justicia de Estados Unidos, Loretta Lynch, que libere los documentos que tienen el FBI y la CIA sobre el asesinato de mi padre", expresó el joven arquitecto.
Muñiz Pérez explicó que durante la gestión del anterior responsable de Justicia federal, Eric Holder, se le enviaron cartas en ese sentido, las que nunca respondió.
"Sabemos que el FBI tiene documentación que contribuiría a esclarecer este asesinato, pero se niega a entregarlos, al igual que la CIA", reiteró.
Durante el acto, Muñiz Pérez hizo un recuento de los esfuerzos que han llevado a lo largo de estos 36 años los familiares y amigos de su progenitor, asesinado por abogar por la reunificación de la familia cubana, principalmente quienes dejaron la patria engañados por la propaganda contrarrevolucionaria.
Muñiz Pérez reveló que se proponen elevar el caso a la consideración de organismo de derechos humanos, un tema que irónicamente preocupa a Estados Unidos cuando se trata de terceros países.
Raúl Álzaga Manresa reconoció en el acto en el cementerio municipal de San Juan que el secretario de Justicia de Puerto Rico, César Miranda, ha sido muy diligente en tratar de obtener la documentación necesaria en poder de las autoridades federales.
"El FBI sigue arrastrando los pies", dijo Álzaga Manresa al lamentar que después de seis reuniones con el secretario de Justicia de Puerto Rico "no se ha podido romper el cascarón del huevo" para fijar responsabilidades sobre los asesinos de Muñiz Varela.
Álzaga Manresa, quien junto a Ricardo Fraga mantuviera estrechos vínculos con Muñiz Varela, dijo que seguirán luchando para que se esclarezca el crimen.
Recordó que el excoronel Maldonado estuvo al servicio de un grupo denominado "Amigos de la Democracia", en el cual figuraban Julio Labatud, José "Pepe" Canosa Rodríguez y Waldo Pimentel Amestoy, quienes presuntamente financiaron la muerte de Muñiz Varela.
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