El rabino Hazzan Jeffrey Myers, de la sinagoga Árbol de la Vida, en una vigilia para recordar a las víctimas del tiroteo del sábado en Pittsburgh, Pensylvania. /Foto AFP |
A lo largo de más de 25 años reportando sobre Estados Unidos para La Jornada nunca imaginé que algún día tendríamos que usar dos palabras para informar sobre la realidad nacional de este país: fascismo y socialismo.
Pero desde las campañas electorales de 2016 y su culminación en el triunfo de un bufón peligroso, esas dos palabras se han vuelto necesarias. Primero, las malas noticias: