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domingo, 4 de septiembre de 2011

Siria: Los acordes nada melódicos que llegan desde Sopot

Lo que está por llegar no se sabe aún. La
campaña mediática sí ya está en marcha.
UE planea aumentar presiones sobre Damasco más allá del embargo petrolero

No son referentes melódicos los que llegan desde Sopot, la romántica sede anual del Festival Internacional de la Canción. Un despacho de la agencia española fechado en la ciudad balneario de la costa meridional del Mar Báltico, al norte de Polonia, apunta que "En el mismo día en el que ha entrado en vigor su embargo a las importaciones del petróleo sirio, la Unión Europea ha apostado por seguir endureciendo las medidas de presión sobre el régimen de Bachar al Asad y por tratar de lograr una condena explícita en las Naciones Unidas".
Desde ya se ve venir lo que sigue, tras el ensayo libio a futuro de cómo cambiar regímenes que adversan los modos de pensar, decir, actuar de las grandes potencias de Occidente.
La nota de la agencia española de noticias refiere que luego de la reunión con los ministros de Exteriores de los Veintisiete, "la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, confirmó en una rueda de prensa que el bloque va a seguir estudiando formas de usar su capacidad, por ejemplo por la vía económica, para presionar a Damasco. 'Las discusiones siguen para ver qué podemos hacer', indicó Ashton, que no quiso especular sobre las posibles medidas concretas...
Si me otorgan licencia, permítanme diseccionar lo que sigue. Hagamos un desmontaje de la información, pieza a pieza, para que veamos que unos de forma más encubierta, otros abiertamente, llaman a dar continuidad en suelo sirio a la experiencia cuyo caldo "cultivan" desde hace más de seis meses en la Jamahiria Árabe Libia. Veamos:
Según el ministro francés de Exteriores Alain Juppé, esos nuevos movimientos pasan por "endurecer las sanciones", "seguir trabajando en las Naciones Unidas para lograr una condena más explícita del régimen sirio" y "trabajar con la oposición".
Por su parte la jefa de la diplomacia española, Trinidad Jiménez, se pronunció en una línea más o menos similar, aunque la diplomática considera clave un pronunciamiento del Consejo de Seguridad: "Es ahí donde tiene que haber una resolución de condena y donde la comunidad internacional puede hacer su fuerza y presión, no sólo para aislar al régimen, sino para demostrar que está en condiciones de apoyar a los ciudadanos que se sienten indefensos ante los ataques", subrayó Jiménez, quien de seguro piensa ya en una propuesta de zona de exclusión aérea para luego continuar con lo que ya se sabe, se ha visto y admitido en Libia.
Sin embargo, desde Dushambé, la capital de Tayikistán, el canciller ruso Serguei Lavrov criticó el embargo petrolero aprobado por la Unión Europea al acotar a nombre de su gobierno que "siempre hemos dicho que las sanciones unilaterales no llevan a ninguna parte. Esto destruye el enfoque de socios ante cualquier crisis".
Acota EFE que "Los Veintisiete no quisieron entrar en polémicas con Moscú, pero defendieron sus sanciones como el método más efectivo para forzar a las autoridades sirias a detener la violencia y abrir un proceso de transición".
Y como parece que a los franceses no les sació el apetito del todo haber sacado como tajada el 35 por ciento del reparto del petróleo libio, aquel que hablaba en ese encuentro por boca del presidente Nicolás Sarkozy ha dicho ni más ni menos que "Si Bachar al Asad no cambia, si no hay un cambio de régimen, habrá que acentuar la presión".
Pido, por favor, un alto en el detalle que sigue ahora. Sólo los conmino a hacer un poco de memoria en el afán de recordar si estas palabras del señor Juppé no son copia al calco de declaraciones escuchadas hace apenas unos meses cuando en Naciones Unidas se "cocinaba" la agresión libia bajo supuestas banderas humanitarias: "la comunidad internacional, la UE y Francia deben ejercer plenamente su responsabilidad de proteger a la población civil de la violencia de los dictadores".
No sé a ciencia cierta si después que lo dijo cayó en cuenta de que podía haber hablado de más, pero de inmediato, en un intento por desfacer el entuerto el ministro galo acotó casi como nota al margen: "Siria no es Libia, pero debemos ser coherentes con nosotros mismos", al tiempo que descartaba la opción de una intervención militar en el caso sirio.
La última ronda de sanciones europeas contra Damasco entró en vigor este sábado e incluye un embargo inmediato sobre el crudo sirio, aunque en el colmo de la desfachatez, Italia, por ejemplo, pidió solicitar una moratoria hasta el 15 de noviembre para respetar contratos en vigor.
Bussines are bussiness y lo que ya está firmado y en blanco y negro debe respetarse, han dicho Berlusconi y los magnates de la compañía petrolera ENI.
"Como importamos un tercio de toda la producción (de crudo) siria, es fácil entender que necesitamos unos días extra para adaptarnos a tener que lidiar sin estos (suministros)", aseguró el ministro de Exteriores de Italia, Franco Frattini.
No obstante, un diplomático que prefirió anonimato explicó que la decisión de Italia tiene que ver con que Roma quiere una prórroga que cubra el tiempo suficiente para acabar de recibir el petróleo sirio por el que ya pagó...

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