La escuadra anfitriona cimentó su éxito en sólida labor monticular del lanzador abridor, el zurdo Carlos Rodon, quien se encargó de maniatar a la selección cubana durante seis entradas y dos tercio de actuación, en las que permitió apenas dos indiscutibles y dispensó once ponches a los bateadores rivales. La derrota fue a la cuenta del avileno Vladimir García, iniciador por Cuba, quien toleró una limpia en sólo un episodio de labor.
Por la Mayor de las Antillas los relevistas Noelvis Entenza y Diosdani Castillo soportaron dos anotaciones per cápita, mientras que Freddy Asiel Álvarez y Raicel Iglesias trabajaron dos tercios de inning cada uno sin permitir mayores libertades a la tanda estadounidense.
Jonrón del receptor Lázaro Herrera en el octavo episodio con Edilse Silva y Yuliesky Gourriel en circulación propició las tres carreras de la escuadra cubana en el desafío, pero el cerrador Ryan Burr se encargó de retirar el noveno episodio para sellar la quinta victoria del cuadro norteño en el tope bilateral.
Michael Conforto y Taylor Sparks lideraron el ataque norteamericano madero en ristre, ambos de 4-2 con un remolque per cápita, mientras que Trea Turner pisó la goma en par de ocasiones.
Cuba cometió dos errores a la defensa y solo pegó cinco indiscutibles en el choque, en consonancia con la sequía ofensiva que sufrió en los cinco partidos celebrados, y que resultó la principal causa de la barrida estadounidense en la serie entre ambas potencias beisboleras.
El elenco cubano cayó en los cuatro partidos previos, siempre con desventaja de una carrera, con pizarras de 2-1, en Des Moines, Iowa, 3-2 y 1-0, en Omaha, Nebraska, y 3-2, Cary, Carolina del Norte, por ese orden. (Con información de la AIN)
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