James y Ronaldo festejan el primero de los tres goles frente al Espanyol. |
El barcelonismo tendrá la palabra. Es el momento de que, en un encuentro del máximo nivel, el conjunto blaugrana saque lo mejor de sí para no empezar a complicar su futuro liguero, una semana después de haber dejado escapar una gran oportunidad con la derrota del Real Madrid en Valencia.
Será el primer duelo en el que se podrá pulsar entre los aficionados la decisión del presidente Bartomeu de convocar elecciones para el próximo verano y demostrar si la decisión adoptada, como aseguró el dirigente, rebaja la tensión ambiental tras el muy publicitado diferendo entre el técnico Luis Enrique y el crack argentino Lionel Messi.
En contraste, el Atlético ha iniciado 2015 con fuerza. Al 1-4 en San Mamés con el que terminó el año le ha dado continuidad con dos triunfos, un 3-1 al Levante en la Liga y un 2-0 al Real Madrid en la Copa del Rey, y con un paso adelante en el campeonato, en el que alcanzó al Barcelona y se acercó al liderato del conjunto blanco.
Un impulso más a la potente temporada del Atlético, que sólo ha perdido dos de sus 17 encuentros oficiales más recientes y que ahora encadena tres triunfos, subido en una nueva ola de ilusión y energía que apunta al Camp Nou y al Barcelona, contra el que resumió con un triunfo y cinco empates sus seis enfrentamientos del pasado curso.
El último, un 1-1 en el estadio azulgrana el 17 de mayo de 2014, sentenció el décimo título de Liga de la historia del Atlético, que mantiene el espíritu competitivo, la mentalidad ganadora, el sentido colectivo del juego y la firmeza defensiva que le dirigió hace ocho meses a un éxito enorme en el mismo escenario del duelo de este domingo.
Ahí le espera de nuevo el Barcelona, que, futbolísticamente, está pendiente de Jérémy Mathieu y de Xavi Hernández. El francés se ha entrenado con el grupo, pero no así el capitán azulgrana, quien será baja para el partido ante los colchoneros.
Pero más que los jugadores, la principal duda que plantea Luis Enrique es el sistema de juego que utilizará ante el equipo de Simeone.
El asturiano ha variado su dibujo en alguno de los partidos importantes disputados hasta ahora y en el caso del encuentro europeo ante el Paris Saint Germain con un resultado óptimo.
Frente a los de Laurent Blanc planteó un 3-4-3, en un choque en el que no podía jugar Dani Alves y, como en el Bernabéu, volvió a sacrificar a Jordi Alba.
Apostó entonces por un doble pivote formado por Busquets y Mascherano; un trío de centrales atrás (Bartra, Piqué y Mathieu), Pedro como carrilero por la derecha, Iniesta en la creación y Messi por detrás de Suárez y Neymar.
Resulta complicado que vuelva a repetir la experiencia. Ahora dispone de Alves y Alba está a muy buen nivel. En todo caso, en el Barça se necesita volver a hablar de fútbol para acabar con esa tensión que rodea la entidad desde hace meses y sobre todo una victoria para no empezar a desengancharse del campeonato.
Enfrente, Simeone ya ultima su once en el Atlético. Después de las rotaciones del pasado miércoles en la Copa del Rey ante el Real Madrid, con siete novedades y triunfo por 2-0, el técnico recuperará toda su alineación tipo de las semanas más recientes, con la vuelta al equipo titular de toda la base que descansó en el pasado derbi.
Ese es el caso del delantero Mario Mandzukic, los centrocampistas Arda Turan, Koke Resurrección y Tiago Mendes, los laterales Juanfran Torres y Guilherme Siqueira y el portero Miguel Ángel Moyá, que se sumarán en el once a Antoine Griezmann, Gabi Fernández y la fiable pareja defensiva uruguaya formada por Diego Godín y José Giménez.
Ni siquiera la recuperación de Joao Miranda, inactivo por lesión en diez de los últimos once partidos oficiales de su conjunto, mueve a Giménez del equipo para el Camp Nou; una nueva prueba más para el sobresaliente rendimiento del joven central charrúa, a un nivel altísimo, con jerarquía, colocación, contundencia, salida de balón, asistencias e incluso dos goles, el segundo el pasado miércoles.
En el once también repite Griezmann. Su explosión en el Atlético ya es un hecho, al igual que su continuidad en la alineación. La conducción, el desborde y el juego entre líneas del internacional francés, con cinco goles en sus últimos tres duelos, encadenarán mañana cuatro encuentros como titular por primera vez este curso.
En el banquillo esperará Fernando Torres, que vuelve al estadio en el que debutó en Primera División el 1 de septiembre de 2002. Ha marcado cinco goles en seis visitas al Camp Nou, donde fue el protagonista de la última victoria del Atlético en esa grama, el 5 de febrero de 2006, cuando hizo 'doblete' y su equipo ganó por 1-3.
Allí no estará el argentino Cristian Ansaldi, la única baja por lesión del conjunto rojiblanco para el duelo y una de las tres ausencias de la convocatoria de 20 jugadores ofrecida por el técnico, junto a Rubén Gracia, 'Cani', último fichaje rojiblanco, y el uruguayo Cristian Rodríguez, ambos por decisión técnica.
Probables alineaciones probables:
FC Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Iniesta, Rakitic; Messi, Suárez y Neymar.
Atlético de Madrid: Moyá; Juanfran, Giménez, Godín, Siqueira; Tiago; Arda, Gabi, Koke, Griezmann; y Mandzukic.
Espanyol no fue rival para los blancos
Y como adelantábamos al comienzo, el Real Madrid se impuso este sábado al Espanyol (3-0) en uno de los cuatro partidos sabatinos correspondiente a la jornada 18 de la Liga BBVA, en un encuentro que dominó de principio a fin y en el que no encontró rival en un Espanyol que no supo atacar a los blancos en ningún tramo del mismo y que supone la primera victoria del año para el líder de la competición.
Los de Chamartín recuperaron sensaciones en un partido cómodo que sirvió para enderezar el rumbo tras dos derrotas consecutivas, la primera en Mestalla (2-1) en la pasada jornada liguera y la última en Copa del Rey ante el Atlético de Madrid (2-0). A pesar del triunfo, el conjunto madridista no recupera la velocidad y la pegada que le permitieron encadenar 22 victorias.
Los de Carlo Ancelotti pudieron disfrutar de una plácida tarde de fútbol en la que consiguieron tres puntos importantes con los que espantan los fantasmas que le vienen acechando durante las últimas semanas. Con un activo Bale y un Kroos que ejerció de perfecto mariscal, los blancos fueron capaces de superar a un Espanyol que no opuso resistencia y que fue el antídoto perfecto para salir del pequeño bache.
En cuanto al encuentro, el Espanyol asustó en la primera jugada del partido con una gran internada de Caicedo por banda. Pero sería un espejismo de lo que acontecería en los minutos venideros, en los que los blancos se hicieron dueños del balón y no dejaron hacer al cuadro espanyolista, que cerró espacios en busca de una contra.
El dominio merengue comenzó a transformarse en ocasiones. Primero, sería Benzema en el minuto 10 quien estrellara el cuero en el poste de la portería defendida por Casilla. Pero fue James el que acertó en perforar la portería del internacional español tras una sensacional jugada del Madrid en la que Bale con un gran cambio de juego para Cristiano y el luso con una magnífica dejada atrás de primeras, facilitarían el tanto del colombiano.
Con el paso de los minutos, los de Sergio González se fueron diluyendo y sólo quedó un equipo en el terreno de juego. El segundo gol llegaría tras una falta en la frontal del área cometida por Fuentes, que estaba siendo el mejor jugador de los blanquiazules hasta el momento. Cristiano, cedió el lanzamiento a Bale y el galés con un exquisito disparo no decepcionó.
La recta final del primer acto estuvo mucho más abierta. Los de la Ciudad Condal demostraron que todavía no habían perdido el pulso y se acercaron, tímidamente, a la portería de Iker Casillas, aunque sin fortuna.
La segunda mitad comenzó revuelta. Un fuerte choque entre Coentrao y Cañas terminó con la expulsión del portugués y la ira en la grada blanca contra el colegiado. Carlo Ancelotti mantuvo la defensa de cuatro con la entrada de Nacho -en detrimento de James- y el su equipo pareció crecerse ante el contratiempo con un juego más intenso y combinativo. Cristiano Ronaldo avisaría primero tras una gran contra pero Fuentes, otra vez providencial al corte, frenaba al máximo goleador de la Liga BBVA. Varane y Bale, que falló un mano a mano, se sumaron a la lista de ocasiones desperdiciadas.
La sentencia definitiva en el marcador llegaría con un asistente y un goleador inesperados, de canterano a canterano. Arbeloa, que se atrevió a pisar la línea de fondo, puso un centro en el segundo palo donde Nacho, libre de marca, batía a Casilla y lograba su primer gol en Liga.
En los demás encuentros de este sábado, Málaga-Villareal y Celta-Valencia firmaron par de empates a un gol por bando, mientras en Ipurua el Éibar conseguía un sufrido 2-1 ante el getafe de Quique Sánchez Flores. La víspera el Levante y Depor La Coruña firmaron un armisticio sin goles, mientras que en la ya inminente fecha dominical, además del Barça-Atlético que cerrará la actividad del primer día de semana, también se verán las caras Almería-Sevilla, Athletic-Elche y Granada-Real Sociedad. El calendario de la décimo octava jornada de Liga se completa el lunes con el duelo Rayo Vallecano-Córdoba. (Resumen de agencias)
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