El pasado 20 de diciembre falleció de meningitis en el Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE) de Madrid la congoleña Samba Martine
Pinche para ver el original |
Samba no sólo no recibió nunca atención médica sino que jamás fue diagnosticada porque en el CIE de Madrid no hay enfermería.
Según testimonió un individuo que estuvo en ese mismo CIE al canal de televisión La Sexta, allí puede haber hasta ocho seres humanos encerrados en un local sin acceso a servicios sanitarios y en pésimas condiciones de higiene. Los CIE han sido denominados como los “miniguantánamos de España” por las atrocidades que allí se cometen con personas que no han sido sometidas a ningún proceso legal.
Sin embargo, ahora medios de prensa españoles y políticos como el diputado del Partido Popular Teófilo de Luis se rasgan las vestiduras por el fallecimiento de un preso que, según la prensa de Miami, murió a causa de “una neumonía que contrajo cuando se negó a usar el uniforme de preso y se declaró en huelga de hambre”. Se reporta que esta persona falleció en el hospital provincial de Santiago de Cuba -a donde fue trasladada desde el puesto médico de la prisión- en medio de un esfuerzo por salvar su vida.
El fallecido se nombra Wilman Villar y el diario El Nuevo Herald, de Miami, dijo que fue condenado a cuatro años de privación de libertad “por asalto, desacato y resistencia”, a pesar de lo cual es denominado “disidente” porque, manipulado por individuos sin escrúpulos, deterioró su salud hasta una situación sin retorno que ya festejaban por adelantado desde inicios de semana quienes necesitan presentarlo como trofeo en su guerra mediática contra la Isla. Según el gobierno cubano Wilman estaba preso por violencia de género, agresión a su esposa y a los agentes que fueron a detenerlo, además afirman que en ningún momento el preso se puso en huelga de hambre.Informes poco difundidos sobre huelgas de hambre y muertes en prisión en Estados Unidos y España, así como la situación de los prisioneros de conciencia en el estado español son analizados en este video de Cubainformación, en relación con la campaña mediática desatada contra Cuba alrededor de la muerte por razones de salud de Wilman Villar, autor de hechos de violencia contra una mujer y las autoridades que se ha intentado presentar como un disidente en huelga de hambre.
Según informe publicado en el sitio elmundo.es , España es el país de la Unión Europea con un mayor número de presos respecto a la población: 155 por 100.000 habitantes. En el 2010 Alfredo Calcedo-Barba, vicepresidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Legal, expresó que “en las prisiones hay entre tres y cuatro veces más enfermos mentales graves que en el conjunto del territorio nacional y que las circunstancias en las que se encuentran los afectados por patologías mentales en las cárceles españolas son lamentables”.
También el sitio digital Arborea comenta en su trabajo, ‘La indignante situación de las cárceles en España’, que “la cárcel no cumple su supuesto papel de reinserción (el 60% de las personas que pasan por prisión vuelve a ser encarcelado otra vez). Las vejaciones y abusos son constantes por parte de los carceleros, y también entre los presos, situación que se ve facilitada por la extrema jerarquización de la comunidad carcelaria, incluso entre los propios presos.
Añadimos además un video (Video 2), también de Cubainformación, sobre el caso de un emigrante marroquí fallecido tras una prolongada huelga de hambre, preso en la cárcel de Teruel (España), en julio de 2011 y otros similares, en comparación con el tratamiento informativo y político dado al del delincuente común cubano Orlando Zapata Tamayo, cuya madre recientemente se fotografió en Miami con el terrorista Luis Posada Carriles.
La muerte de un ser humano siempre es dolorosa pero parece ser que algunas duelen más que otras, en dependencia de oscuros intereses políticos. De una parte, en el Estado español, tenemos una persona que sin ser juzgada por delito alguno muere sin recibir atención médica en condiciones infrahumanas, y por otra, el fallecimiento de un individuo que condenado en un tribunal por hechos de violencia es convertido en arma arrojadiza contra la Revolución cubana, a pesar de recibir la atención médica que en la Isla está al alcance de todos los ciudadanos, independientemente de su condición legal o política, incluyendo la protección contra la menigintis con una vacuna desarrollada por científicos cubanos que ha salvado millones de vidas en todo el mundo. Pero, asombrosamente, el nombre de Samba Martín, asesinada por la “democracia”, española seguirá siendo desconocido para muchos, mientras que el de Wilman Villar es enarbolado ahora mismo por la jauría político-mediática que lo llevó hasta la muerte para presentar a Cuba como una “dictadura”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario