Santa Sede respalda rechazo del episcopado cubano de avalar la ocupación ilegal de una iglesia por disidentes
Federico Lombardi, portavoz vaticano, dijo hoy que un encuentro entre Benedicto XVI y Fidel Castro es "una eventualidad posible" y, aunque no figura en el programa de la visita papal a la Isla, si el líder cubano "desea encontrarlo, el pontífice lo verá con mucho gusto".
Estas declaraciones fueron formuladas por el padre jesuita durante la presentación del viaje que efectuará el Papa a México y Cuba del 23 al 28 de marzo, gira en la que, precisó, el Sumo Pontífice lanzará un mensaje de "esperanza de paz y de futuro".
Benedicto XVI cumplimentará del 26 al 28 de marzo la segunda visita de un Papa a Cuba. La anterior, de Juan Pablo II, ocurrió en 1998.
El portavoz aprovechó la ocasión para expresar el respaldo de la Santa Sede al rechazo del episcopado cubano de avalar la ocupación ilegal de una iglesia por disidentes.
"Me parece que, incluso en los sectores de la oposición, hay opiniones contrarias (a la de los disidentes), que estiman que no es una buena iniciativa", dijo el padre Lombardi.
Un primer comunicado del Arzobispado de La Habana había condenado la provocación el miércoles, tildando de ilegítimo e irresponsable "todo acto que pretenda convertir el templo en lugar de demostración política pública, desconociendo la autoridad del sacerdote, o el derecho de la mayoría que va allí en busca de la paz espiritual y el espacio para la oración".
En horas de la noche del jueves, y a solicitud de las autoridades eclesiásticas cubanas, los trece ocupantes fueron retirados sin que oposieran resistencia a los agentes del orden interior desarmados. Se ponía fin así a una crisis que nunca debió producirse, luego de más de 48 horas de permanencia ininterrumpida y no autorizada de esas personas en el interior del Santuario Diocesano y Basílica Menor de Nuestra Señora de la Caridad en La Habana.
La visita a Cuba se celebra en el Año Jubilar por el 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad de El Cobre, patrona de la isla. El Papa irá como un peregrino más a su santuario, cercano a Santiago de Cuba, lo que no pudo hacer Juan Pablo II durante su histórica visita a la isla en 1998.
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