Una fuerte respuesta del pueblo de Miramar recibieron las llamadas Damas de Blanco (pronorteamericanas) al intentar una provocación luego de culminar su habitual caminata de domingo por 5ta Avenida, en La Habana.
Aprovechando el dolor de los cubanos por la enfermedad de Chávez, las Damas de Blanco se desviaron de la ruta y en 3ra y 24, Miramar, intentaron montar un show mediático que recibió una pronta respuesta de los pobladores del lugar.
Es habitual que la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana oriente a sus asalariadas en Cuba realizar manifestaciones provocadoras horas antes del 10 de diciembre, cuando el mundo celebra el Día de los Derechos Humanos.
El objetivo es tener una justificación para llamar la atención de la prensa y levantar campañas difamatorias durante esa jornada, marcada en la Isla por encuentros deportivos y culturales, entre ellos los recientes conciertos de Zucchero, dedicado a Cuba y a las víctimas del huracán Sandy, y el de Julieta Venegas, este último como parte de una campaña mundial de la ONU para acabar con la violencia contra las mujeres.
Las autoridades correspondientes, ante las indisciplinas sociales en que incurrieron las Damas de Blanco, procedieron a retirarlas del lugar en varios ómnibus y retornarlas a sus lugares de origen, como casi siempre ocurre.
Los escándalos de las Damas de Blanco y los llamados disidentes (pronorteamericanos) forman parte de una vieja fórmula de Estados Unidos para tratar de concretar en Cuba la llamada “primavera árabe” que, lejos de llegar, ha incrementado el nivel de compromiso y participación del pueblo con su Revolución y Partido en los cambios que tienen lugar ahora en la Isla. (Tomado del blog de Yohandry)
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