Senador anticubano Bob Menéndez metido en atolladero de sexo y violencia

El senador demócrata Bob Menéndez, ex alcalde de Union City, localidad vecina de New York donde por sus tropelías le llegaron a comparar con el capo mafioso Meyer Lansky -aquel que en los años 50 del pasado siglo dominaba a su antojo La Habana del crimen, la corrupción y el juego-, podría acabar su carrera política, ahora como como “chairman” de las relaciones internacionales en el Senado, atollado en turbios asuntos que lo vinculan con dos prostitutas y un violador requisitoriado por la justicia.
Según despachos de noticias, el tema salió a flote después del escándalo que lo involucra con dos prostitutas insatisfechas en República Dominicana, mientras la policía de Inmigración (ICE) acaba de arrestar a uno de sus ayudantes, un ilegal peruano condenado por violador.
Sobre este último detalle Menéndez confirmó que uno de los becarios empleados por su oficina -escogido entre centenares de solicitantes- fue arrestado hace unos días bajo delitos de, a la vez que resultar un inmigrante ilegal, tener antecedentes de violación sexual.
El senador de extrema derecha reconoció al individuo, identificado como Luis Abraham Sánchez Zavaleta, de 18 años de edad, oriundo de Perú,  contratado como becario en su oficina a pesar de poseer un visado ya caduco y encima de ello contar con un expediente judicial horroroso.
Desde principios de octubre las autoridades del condado de Hudson, Nueva Jersey, habían informado a agentes de Inmigración y Control de Aduanas que sospechaban de Sánchez como un inmigrante ilegal buscado en calidad de delincuente sexual. Sobra decir que con tal mácula Sánchez Zavaleta clasificaba como elegible para ser deportado de inmediato a su país.
Sin embargo, debido a la cercanía de las elecciones presidenciales de noviembre, la información de los agentes del ICE en Nueva Jersey fue "retenida" por órdenes superiores directas del Departamento de Seguridad Nacional, donde consideraron que se trataba de un arresto “potencialmente de alto perfil” que podría lacerar la campaña para la reelección del presidente Barack Obama, confirma un despacho de la AP.
Bella ilustración de con cuánta "transparencia" funciona el sistema en la nación del Norte.
La violación de la cual se acusó al peruano fue cometida en territorio estadounidense pero por tratarse de un delincuente menor de edad en el momento del acto, no se revelan sus circunstancias ni el proceso judicial al cual fue sometido.
Tampoco se sabe hasta ahora si el joven arrestado pertenece a la rica familia Zavaleta de Perú, la misma que hace más de seis años mantiene un litigio con el Estado peruano al reclamar que se les reconozca como dueños del santuario inca de Machu Picchu.
Pero el caso Sánchez Zalaveta no es el único que ha contribuido a minar la carrera política de uno de los más recalcitrantes dinosaurios de la mafia anticubana.
El último escándalo hizo resaltar otro al cual Menéndez logró escapar unos días antes de las elecciones del 7 de noviembre.
Todo empezó cuando dos prostitutas de República Dominicana se comunicaron con el sitio web The Daily Caller (La Llamada Diaria) -vinculado al ex vicepresidente Cheney-, para denunciar que el Senador les había prometido pagar 500 dólares por sus servicios sexuales y que al final cada una  recibió 100 dólares en lugar de la suma prometida.
Las dos mujeres aseguran que su encuentro con el político sucedió en la Casa de Campo, una lujosa propiedad de 7 000 acres (28,3 kilómetros cuadrados) en La Romana, República Dominicana, donde casualmente tiene su mansión el multimillonario de origen cubano Gustavo Cisneros Rendiles.
De forma bien sospechosa, la noticia tuvo poca difusión en los días anteriores a los comicios, lo que llevo a muchos observadores a comentar que los estrategas demócratas supieron “tapar” a su manera toda filtración.
Pero la situación acaba de cambiar y podría catapultar a Menéndez fuera de todo puesto de prestigio para el resto de su carrera.
A algunos la noticia los ha tomado por sorpresa, pero no a la gente de Union City, que recuerda al ex alcalde como el tipo bajo cuyo mandato la ciudad se convirtió en enclave del hampa donde prosperaban la prostitución, el juego y el racketeering (la extorsión mafiosa).
Vinculado a los círculos contrarrevolucionarios de Miami, Menéndez es socio de los mismos delincuentes que, con dinero de la sección de Nueva Jersey de la Fundación Nacional Cubanoamericana, financiaron las operaciones del terrorista internacional Luis Posada Carriles.