El jurado de Poesía al evaluar 328 títulos, decidió premiar a Pujato, del argentino Gabriel Cortinas por su completad y realización dentro de su línea estética, según se informó en la ceremonia de premiaciones.
Asimismo destacaron a la obra de Cortiñas por "un decir poético comunicativo y una vena narrativa que nos conduce a una épica menor, cotidiana, sobre la extrañeza del trabajo de los foqueros australes".
En ese apartado, también se entregaron menciones a Retratos mal hablados, de Leonel Alvarado (Honduras) y Los tiempos de la humanidad, del ecuatoriano Cristian Avecillas.
Por su parte, en Ensayo de tema histórico social, de los 43 títulos evaluados, fue laureado Cuba y los cubanoamericanos. Un análisis de la emigración cubana, del cubano Jesús Arboleya, "por la claridad y fluidez expositiva, sin restarle rigor ni profundidad analítica".
Según el jurado, la obra "reconstruye en forma detallada, con un sólido respaldo documental, el tema de las relaciones entre Estados Unidos y la Revolución cubana desde la perspectiva de las políticas migratorias de ambos países".
En tal sentido, elogió la manera en que desmitifica una problemática de mucha actualidad que ha sido objeto de diversas interpretaciones.
A propósito de ese apartado, los especialistas otorgaron mención a tres ensayos. Uno de ellos es Piedras, barricadas y cacerolas: sonido y fuerza de la resistencia en Chile. Las Jornadas Nacionales de Protesta 1983-1987, de la chilena Viviana Bravo Vargas.
También recibieron ese galardón: Diplomacia imperial y revolución. Estados Unidos ante la Revolución cubana 1959-1960: del reconocimiento reticente a la ruptura ominosa, de Carlos Alzugaray; y Hemingway, ese desconocido, de Enrique Cirules, ambos de Cuba.
Durante la entrega de los Premios Casa, en su 54 edición, fue laureado en Literatura testimonial -entre los 55 trabajos presentados- La sombra del tío, del argentino Nicolás Doljanin, por el valor de ser el "lugar de máxima exposición pública y el de mayor intimidad".
El jurado explicó que el libro da testimonio de tres personajes que circulan por el amplio universo de la lucha contra el imperialismo, en un periplo que, a partir de la Argentina previa a la última dictadura, pasa por México, Nicaragua y se centra en El Salvador.
Asimismo, consideró otorgar tres menciones a El honor de la cuadra, de Nicolás Goszi (Argentina); Como una espada en el aire, de Sócrates Zuzunaga Huaita (Perú) y Carpentier, la otra novela, del cubano Urbano Martínez.
Otros de los géneros en concurso fue el de Literatura brasileña, del cual resultó premiada la novela Domingos Sem Deus, de Luiz Ruffato, que retrata el día a día del proletariado brasileño, realidad poco visible en las narrativas contemporáneas.
Los especialistas estimaron que de los 158 títulos recibidos, la obra de Ruffato "presenta diversos episodios independientes que se entrelazan, formando el mosaico de un Brasil esencial, aunque olvidado".
En ese apartado otorgaron mención especial a la novela Carbono Pautado, Memória de um Auxiliar de Escritorio, de Rodrigo de Souza Leão. Además de una mención a O Mendigo que Sabia de Cor os Adágios de Erasmo de Rotterdam, de Evandro Affonso Ferreira.
A propósito del género Novela, el jurado acordó por mayoría declarar desierto el premio, por estimar que -pese a las virtudes de varias de las 172 concursantes- ninguna de ellas alcanza el nivel requerido como para ser merecedora de este reconocimiento.
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