Beisbol Cubano: Pinar dejó al campo a Matanzas con jonrón que bien puede valer un título (+ Score)

Con el zwinazo a una recta de Bustamante, Osniel Madera cayó sentado sobre el plato, y desde allí disfrutó el jonrón que dejó tendidos a los matanceros. /Foto: Ismael Francisco.

Decisivo cuadrangular del pinareño Osniel Madera a la salida del onceno episodio dejó tendido al campo a Matanzas 9x8 en el quinto juego de la gran final del Campeonato cubano de Béisbol, resultado que colocó al elenco occidental a solo un triunfo de reeditar su título más reciente, el de la Serie de Oro (SN número 50), también bajo las riendas del experimentado mentor Alfonso Urquiola.
En desafío celebrado en el parque pinareño Capitán San Luis, los Cocodrilos matanceros llegaron al noveno episodio con ventaja de 8x5, pero el conjunto anfitrión aprovechó el descontrol de los relevistas yumurinos para igualar el duelo con racimo de tres anotaciones a la salida de esa entrada y mandar el juego a extrainning. A empezar desde cero, como se dice.

Precisamente, la carrera del empate, anotada por William Saavedra, llegó con elevado de sacrificio del propio Osniel Madera a casa llena y un sólo out ante los envíos de Alexander Bustamante, sexto serpentinero empleado por Víctor Mesa en el choque. El diestro cargó con su primera derrota frente a dos triunfos en la postemporada, al permitir además el cuadrangular del indiscutible héroe del partido en el onceno capítulo.
Entrevistado para los medios, el pimentoso y versatil jugador, que hoy se desempeñó en los dos jardines de las bandas y también en la defensa de la llamada esquina caliente, comentó que se había preparado para conectar una recta. "En el turno anterior Bustamante me tiró varios lanzamientos rectos y me alisté para pegarle con todo". Y tan así resultó, que con el swinazo Madera terminó sentado sobre el plato luego de perder el equilibrio tras descargarle toda la adrenalina contenida a la Mizuno 200, para desde allí disfrutar el vuelo de Doña Blanca antes de arrancar la carrera en redondo, que esta vez resultó una suerte de vuelta olímpica, asediado por todo el equipo volcado al terreno en son de celebración incontrolable.
En resumen, Madera pegó de 5-2 con un jonrón y las dos carreras más importantes fletadas hacia la goma, para alzarse como líder indiscutido de la ofensiva de Pinar del Río, junto al oportuno William Saavedra, autor de un doblete y tres empujadas, y Roel Santos, quien conectó de 5-3 con cuatro anotadas.
El refuerzo espirituano y designado Eriel Sánchez sobresalió por Matanzas desde el cajón de bateo, al pegar de 4-2 con tres impulsadas, secundado por Yadiel Hernández y Yasiel Santoya, con par de remolques per cápita en el encuentro.
Desde el montículo se llevó las palmas el relevista derecho Yaifredo Domínguez –el último de los 11 lanzadores empleados por el mentor pinareño–, un joven de 28 años y dos series nacionales que apenas toleró par de imparables en tres episodios de labor para adjudicarse la crucial victoria.

Donald Duarte no dudó en vestir los arreros en la décima entrada. /Foto: Ismael Francisco.

El choque, trepidante de inicio a fin con constantes remontadas de uno y otro bando, también estuvo marcado por otras actuaciones memorables, como la del experimentado antesalista Donal Duarte, quien no dudó en vestir los arreos de receptor por primera vez en series nacionales, cuando presionado el alto mando pinareño por el límite de cambios reglamentados (Urquiola desconocía que aún disponía de otras dos movidas y con sinceridad así lo expresó durante la conferencia de prensa), le pidió a su mentor recibirle a Yaifredo para recordar sus tiempos como juvenil, comentándole que en un mundial de esa categoría lo había hecho. "Pues dale y mira a ver cómo resuelves", le confió el experimentado manager.
Al término del desafío, Urquiola elogió la disposición de Duarte para ocupar la receptoría, e hizo énfasis además en la importancia de este triunfo para regresar al estadio Victoria de Girón, de la ciudad de Matanzas, con ventaja de 3-2 en la serie por el título del béisbol cubano.
"Pinar del Río es un equipo de tradición que nunca se da por vencido y sale a pelear cada encuentro con el solo objetivo de conquistar la corona", precisó a la prensa el laureado estratega, ganador de dos campeonatos con el elenco de esa occidental provincia en 1998 y 2011.
Tras negociar saldo positivo de dos triunfos en sus predios del "Capitán San Luis", ahora la escuadra pinareña apenas precisa de un éxito en el parque matancero Victoria de Girón, que acogerá la reanudación de la Gran Final desde el venidero martes.
Matanzas, por su parte, está obligado a ganar los dos desafíos restantes para adjudicarse un título esquivo para esa provincia por más de dos décadas, desde que el extinto equipo de Henequeneros se coronó en 1991.

Resultado del domingo:

Estadio Capitán San Luis, Pinar del Río. / domingo 13-4-14

Equipos	1	2	3	4	5	6	7	8	9	10	11	C	H	E
Matanzas	2	1	0	0	0	0	3	2	0	0	0	8	10	0
P. del Rio	1	0	2	1	0	0	1	0	3	0	1	9	12	2

Ganó: Yaifredo Domínguez (1-0, 1-1) / Perdió: Alexander Bustamante (2-1, 3-3) / Hr: Osniel Madera (1/4).