viernes, 17 de junio de 2011
¿Por qué nos sorprende?
Sé que muchos, inclusive mis colegas de Radio Miami, han escrito y hablado sobre el espanto de la decisión del nuevo alcalde de la Ciudad de Hialeah, Carlos Hernández, y del ayuntamiento de esa ciudad de otorgarle las Llaves de la Ciudad de Hialeah al terrorista Luis Posada Carriles.
Pero, a pesar de ser así, culpable de ser reiterativo, por razones de elemental decencia, no puedo evitar escribir sobre este repudiable hecho.
La entrega de las Llaves de la Ciudad de Hialeah a Posada Carriles ocurrió (...) el martes pasado 14 de junio, día que en Estados Unidos se celebra el Día de la Bandera.
Acabo de regresar de Cuba. Ese día, 14 de junio, los cubanos y cubanas dignos, además del natalicio de Ernesto Guevara, conmemoran también el natalicio del Lugarteniente General Antonio Maceo.
No puede haber ejemplo mejor que éste para nuevamente hacer evidente la abismal diferencia entre los valores que sustentan a la nación cubana y los que sustentan al sector ultraderechista cubano americano en Estados Unidos, principalmente en el Sur de la Florida.
Aquí en el Sur de la Florida ningún cubano se llama a engaño sobre quién es y de cuántos odiosos crímenes es culpable Luis Posada Carriles; tanto los que llevamos cincuenta años o más en estas tierras como los que han venido de Cuba en años más recientes.
Convencido estoy que esos señores y señoras que conforman el ayuntamiento de la Ciudad de Hialeah y el flamante nuevo alcalde de esa ciudad, ignoran que ese día se conmemora el natalicio del Mayor General Antonio Maceo. Paradigma de lo que debe ser todo cubano y cubana patriota.
Todo lo contrario a lo que es y ha sido Luis Posada Carriles. Posada Carriles es de la estirpe de los que como Arsenio Ortiz y Esteban Ventura, esbirros asesinos de los dictadores Gerardo Machado y Fulgencio Batista respectivamente, vilmente han ensangrentado la vida misma del pueblo cubano.
El sector ultraderechista cubano americano durante los últimos más de cincuenta años se ha debido a causar el mayor daño posible al derecho a vivir y a desarrollarse en paz del pueblo cubano. Más de 3,478 de cubanos y cubanas asesinados y más de 2,100 físicamente discapacitados son el resultado de las campañas terroristas contra ese pueblo perpetradas por terroristas como Luis Posada Carriles, porque claro está que sabemos de que él no es el único terrorista responsable de tantos crímenes.
¿Entonces, por qué nos sorprende que el alcalde y el ayuntamiento de la ciudad de Hialeah le hayan otorgado las Llaves de esa ciudad a ese monstruo por, según dicen, su “inquebrantable dedicación al avance de la democracia y la libertad de Cuba”?
¿Por qué sorprendernos por este hecho deshonroso, si sabemos que ese tipo de gente, como son esos políticos de Hialeah, piensan igual que Luis Posada Carriles y sus consortes terroristas sobre lo que hay que hacerle a Cuba?
El otorgamiento de las Llaves de esa ciudad a Posada es consecuente con la falta de ética de gente como ellos. Como es consecuente con lo que ellos, y todos los de su estirpe, sienten por la nación cubana.
Es mejor así. Hechos como éste le demuestran al mundo quiénes realmente son esa gente.
*El autor es periodista cubano residente en EEUU.
Publicado por
storm captain
en
3:42:00 p. m.
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Etiquetas:
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Me gusta tu artículo. No hay verdad más grande que la que has dicho. No importa, la dignidad cubre con creces la desdicha de haber vivido en Cuba, quererla borrar del mapa, y sentir que toda la verdad cae de bruces y se le amontona sobre sus mezquinos deseos, porque hay un pueblo que se empina cada vez más como lo hicieron los mambises, la generación del 30, los rebeldes de la sierra y el llano y los internacionalistas de hoy. Es un ejemplo al mundo de belleza humana. !Qué pena! le dieron la llave pero nosotros le mandamos millones de cerraduras.
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