El comité Judicial de la Cámara de Representantes aprobó hoy una iniciativa que aboliría la lotería de visas organizada cada año por el Departamento de Estado.
La idea debe pasar ahora al plenario de la Cámara donde los legisladores decidirán la vigencia de este programa, mediante el cual 55 mil extranjeros reciben visa como parte de su aspiración a conseguir la residencia en Estados Unidos.
Algunos legisladores como el republicano Bob Goodlatte, de Virginia, manifestaron su oposición a que se mantenga este tipo de plan porque puede ser usado por terroristas y narcotraficantes para asentarse en el país.
Por su parte, la mayoría de los demócratas en la Cámara están en contra de la eliminación del programa, entre otras razones porque termina con la inmigración legal de africanos y resta cupos a la cantidad de visas disponibles para todos los inmigrantes legales.
En el tema migratorio, los demócratas abogan por una reforma amplia de las leyes que regularice la situación de cerca de 11 millones de indocumentados residentes aquí, demanda que es apoyada por la mayor parte del sector empresarial estadounidense, ahora aquejado de mano de obra barata.
En criterio de no pocos especialistas, la Lotería de Visas del Departamento de Estado hacía de tapadera legal que respaldaba un minucioso programa de robo de cerebros, en especial en naciones del Tercer Mundo.
Una verdadera lastima ya que estas loterias daban oportunidad no solo a cubanos sino a mucha gente de cumplier el sueño americano y a los EE.UU de hacerse de gente valioso que no tiene otra oportunidad de residencia mas que esta.
ResponderEliminarMire, yo no sé si habrá que ser especialista para darse cuenta, pero la famosa Lotería (que entre otras cosas no dejaba trabajar por la cantidad de mensajes spam que enviaba "capricosamente" - y qué casualidad- a los lugares adonde más le interesaba al promovente que llegaran) es una clara fachada para enmascarar el más descarado de los robos o acto de "piratería" que nación alguna pueda emprender contra otra, sobre todo si la "doliente" es del ahora llamado mundo de las naciones en desarrollo, eufemismo que han afirmado los medios con el apoyo de la veleidosa ONU a base de repetirlo. Primero: se trata de países subdesarrollados (quizás alguno, sí, pueda calificar como nación en vías de desarrollo, aunque lamentablemente no es la regla, más bien la excepción). Segundo: Nada ni nadie justifica que por cuestiones de supremacía económica un país se pueda arrogar el derecho de "robarle" a otro su más valioso tesoro: sus recursos humanos de alta calificación, mediante la política de la "zanahoria y el cordel". Toda persona está en el derecho de hacer con su vida lo que le venga en gana siempre y cuando no violente las normas de orden y legalidad existentes en su ámbito, pero igual, a cada país le es lícito proteger el capital humano que crea para el beneficio suyo y de sus conciudadanos, sobre todo si para formarlo debió emplear cuantiosos recursos sin pedirle al graduado ni un céntimo a cambio.
ResponderEliminarA otro con el cuento de la Lotería, que en mi parecer es (o mejor era) el menos encubierto de los programas de desangre de profesionales de los países del Tercer Mundo. Reitero: no hay que ser especialista para darse cuenta. Gracias por la oportunidad de opinar.
Lástima?? no lo creo, no soporto creerlo, apenas escucharlo, o leerlo.
ResponderEliminarA estas alturas, sentarse y presenciar cómo un montón de dinero en lote logra denigrar tantas cosas!!!, cómo se roba a las personas, a las vidas anteriores... es un capricho innombrable de un país con estrellas y barras en su bandera.
No, no es una lástima... empecemos a apoyar los cambios positivos,
Natalia, con el debido respeto a su opinión, que como ve, ha sido publicada sin quitarle ni una coma. Pero me compele llamar la atención a los lectores sobre un detalle: "hacerse de gente valioso(a)" es llamarle casabe al pan. Y el pan es pan, y el vino, vino. Hacerse de gente valiosa mediante lotería es ni más ni menos robar talentos, como aseguran los especialistas en esos temas. Quizás algún día se sepa la verdad completa, pero en el caso Cuba no conozco aún del primer taxista, plomero, bodeguero o albañil que haya ganado la lotería (y perdonen quienes ejercitan estos oficios por la mención, que no tiene como fin resultar peyorativa) Todos los que he tenido oportunidad de conocer han sido médicos, ingenieros, arquitectos. Quizás algún lector de otras latitudes y gentilicio pueda aportar elementos de su experiencia particular en este sentido. Natalia, le reitero las gracias por haberle dedicado tiempo a esta humilde blog, la invito a sumarse a su lista de seguidores.
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