Manuel Benítez del Río
Uno nunca llega a conocer bien a las personas...
Tan mala prensa que tiene mari-Ano Rajoy y sin embargo nos está dando un señor ejemplo de lo que es ser un tío austero y bragao.
El puente* del 1 de Mayo se lo pasó en la finca de Los Quintos de Mora, en Los Yébenes, Toledo, adonde viajó en coche y no en helicóptero, con menos escoltas de lo habitual en otros mandatarios y con la cena en unos cuantos tuppers -cacharros plásticos en Cuba- para no molestar al cocinero de la estancia, ya que llegaron de noche.
¡Ñoooooooo... apretó!
Eso es lo que yo llamo ser un tío austero, delicado y buen jefe. Y es que a la larga, como mari-Ano siga en el poder nos va a demostrar que él es tal cual él mismo se autodescribió en una entrevista con la periodista Carmen Rigalt:
“Soy un tipo normal”, reconocía, y también que su pasión es “jugar a las cartas, un entretenimiento maravilloso". Voy a un pueblecito en Toledo -narró- algún fin de semana a comer migas con huevo frito y a jugar al tute cabrón. "Un plan estupendo que recomiendo: migas, café, copa, puro y partida de tute cabrón”.
Hay que tener en cuenta que la ‘finquita’ del pueblecito de Toledo es ostentosa -en sí misma y por sí misma- una propiedad de sueños brotando entre lo que fuera la miseria de la postguerra. Así es y no es menos.
Por ella han pasado no precisamente ciudadanos corrientes, sino jefes de Gobierno, como Bush en la época de Aznar. Pero en cualquier caso, para Rajoy era el viaje más cercano a Madrid, austero y maravilloso posible.
Él mismo lo confesó en una entrevista al decir que su plan para el puente del Primero de Mayo fue el mejor de los planes posibles, a lo que hay que agregar que esta vez el “tipo normal” fue el huésped distinguido de la finca propiedad del Estado, de la que afirmó, por cierto, George Bush Jr. cuando fue invitado por su amigo Aznar:
“Oh, esta mansión es como mi rancho de Crawford, en Tejas”, lo que nos da una somera idea de qué finquita estamos hablando.
Con este viaje mari-Ano cree haber demostrado que no es un presidente ostentoso y que es consciente del momento de crisis que vive España. ¡Que se lo crea la madre que lo parió!
Pero hay que entenderlo. Aprovechando que era puente en Madrid, y teniendo en cuenta que no pudo disfrutar de vacaciones de Semana Santa, el presidente decidió salir de La Moncloa "un par de días para descansar”. Vamos, que el hombrín también tiene derecho, ¡joder!
Su escapada coincidió -aunque esto se lo calla mari-Ano- con las manifestaciones en 50 ciudades españolas por el Primero de Mayo, protesta unánime contra los recortes sociales del Gobierno, especialmente sus decretazos en educación y sanidad.
Pero él hizo que miraba para otra parte y efectivamente miraba hacia otra parte, porque por poder... Se podría haber ido a Canarias, destino que suele frecuentar cuando su trabajo se lo permite. E incluso más lejos. Pero no.
El presi optó por la finca de Los Quintos de Mora, a tan sólo una hora y media en coche de Madrid para estar disponible de inmediato, si fuera necesario. A éso es a lo que yo llamo tener espíritu de sacrificio.
Hasta allí se desplazó con su mujer, la Viri, sus dos hijos, el Mariano y el Juan, y también con su padre, que tenía mucho interés en conocer este lugar. No digo yo si el viejo iba a tener interés... ¡carajo!
Según testimonios, la sencillez del presidente impactó al personal de servicio de la finca.
“A diferencia de sus predecesores, que viajaban hasta aquí en helicóptero, con un despliegue de seguridad digno de una película de acción y con una ambulancia en la puerta por si surgía alguna urgencia, él se desplazó en coche y con los guardaespaldas necesarios”.
Pero lo que más llamó la atención, fue el hecho de que la familia Rajoy, “como llegó por la noche, traían varios tuppers con la cena preparada para no molestar al cocinero de la finca".
Otro punto que contrasta con anteriores presidentes del Gobierno. Ellos siempre se traían a su chef personal, mientras que la familia Rajoy ha cenado lo que ellos mismos trajeron y compartieron con los que trabajan allí, es decir el contenido de los tupers.
¿Será que mari-Ano además de austero, mentiroso y recortón está haciendo publicidad a los tuppers?
(*) En España significa descanso, asueto. Irse de puente es salir de vacaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario