El investigador Sergio Rodríguez Elizarrarás expuso que todo indica que fue a parar al municipio de Hueytamalco, en la Sierra Norte, un sitio muy accidentado al que no es fácil acceder y donde se continúa la búsqueda con apoyo de las autoridades municipales y estatales de Protección Civil.
“Tenemos un área de mayor restricción, un polígono donde probablemente pudo haber caído".
El interés que tienen los geólogos por hallar el supuesto meteorito, responde a que a través de él se puede obtener información acerca del sistema solar y de la propia Tierra.
Los especialistas entrevistaron a personas en diferentes comunidades en municipios de Hueytamalco y Acateno, en Puebla, y Tlapacoyan, Martínez de la Torre y Atzalan, en Veracruz, que no se conocen entre sí, donde se presume hubo la mayor percepción de ese evento. Sin embargo, los testimonios se extienden a sitios más alejados, como Iztapalapa, en el Distrito Federal, y Tuxpan, Poza Rica y Xalapa, en Veracruz, que coinciden en fecha y hora: 22:15 horas del pasado viernes.
De acuerdo con testigos, esa noche un resplandor atípico cruzó los cielos de la parte centro-oriental de México. De una luminosidad muy intensa, este fenómeno produjo también un estruendo, la propagación de ondas acústicas y vibración del suelo, se detalló en un comunicado.
“En México ocurre la caída de meteoritos de dos o tres veces al año, pero a nivel global sucede mil veces en el mismo periodo. Sin embargo, en los últimos 40 años se han encontrado entre 20 y 30, y sólo un par se vieron caer”, refirió Fernando Ortega Gutiérrez, investigador del mismo instituto.
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