La disputa Cuba-Brasil en el medallero, tan cerrada como la de cubanas y brasileñas en los enfrentamientos históricos del voleibol. |
¿Ya alcanzamos a Brasil? La pregunta es recurrente y la he escuchado en boca de personas en quienes ni remotamente jamás pensé se inmutarían en hilvanar ni la más leve alusión sobre deportes.
Durante años, a partir de los VI Juegos desarrollados en la ciudad colombiana de Cali, las delegaciones de Cuba a estas citas regionales nos acostumbraron a hacerse siempre con el segundo lugar del medallero general, aventajadas únicamente por Estados Unidos, a quien incluso tuvimos la osadía de superar por un título (131) en los únicos Panamericanos organizados en la Mayor de las Antillas (1991).
La última oportunidad en que una embajada deportiva cubana quedó fuera de ese puesto ocurrió en 1967, durante los V Juegos de Winninpeg, en Canadá. Allí los nuestros se ubicaron sextos, superados del peldaño precedente apenas por una presea de bronce de más en el botín de México, con balance de 7 de oro, 16 plateadas y 24 de bronce.
Cuatro años después, en Cali, el gran salto: Cuba segunda con cosecha de 31-49-25. Y así invariablemente hasta los pasados XV Juegos Panamericanos de Río 2007, en que la delegación anfitriona se acercó peligrosamente a sólo siete títulos de Cuba, 52 contra 59.
En ese entonces hubo quienes intentaron hallar la explicación en un hecho sin dudas irrebatible. La condición de sede permite asegurar mayor presencia de concursantes en todos los deportes posibles, tal cual fue el caso de La Habana 91, en que por única vez Estados Unidos no figuró primero por el total de pergaminos panamericanos.
Sin embargo, la progresión desde el último ciclo panamericano y el incuestionable avance del Gigante Sudamericano en un buen número de disciplinas como resultante de políticas gubernamentales enfiladas a brindar mayores facilidades de participación ciudadana en la sana actividad del músculo, hicieron vislumbrar la cerrada porfía a la que ahora asistimos: a falta de dos fechas competitivas en Guadalajara 2011, Cuba aún es aventajada por Brasil en el medallero general, aunque las actuaciones en el atletismo, donde la delegación cubana mantuvo su ritmo arrasador al conquistar este jueves cinco medallas de oro, más una del judo y otra en el kayak, permitieron recortar la diferencia a sólo dos títulos.
Empero, los brasileños se resisten a entregar el segundo puesto de la tabla general y alcanzaron seis metales dorados (dos en atletismo, dos en judo, una en gimnasia artística y otro en levantamiento de pesas).
De tal forma, los suramericanos acumulan 39 oros, por 37 de los cubanos, quienes este viernes, al parecer, podrán por fin tomar por asalto el subliderazgo de la clasificación general, por intermedio del campo y pista y el boxeo.
Estados Unidos continúa al frente del medallero, con 78 preseas áureas y 203 en el total, en tanto México (31 oros) y Canadá (24) completan el grupo de los cinco grandes del deporte regional.
De todas maneras, y en vista de la "fiebre" panamericana que se ha apoderado entre los cubanos de todas las edades sin distinción de sexos, no dudo que poco antes de apagarse la llama del pebetero a algún(a) despistado(a) se le ocurra preguntar, "Bueno, por fin, ¿ya alcanzamos a Brasil en el medallero?
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