Luisa María González
Las coordinaciones necesarias para concretar de inmediato los acuerdos del VIII Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco cubanos antiterroristas condenados en Estados Unidos son el tema que centraron hoy las conversaciones de muchos de sus participantes en la jornada de clausura de la cita.
Dialogaron a dúos, tríos o en grandes grupos, personas llegadas de 47 países, y de pronto nos encontramos a un ruso y un árabe esforzando su inglés o español para poder comunicarse y acordar qué harán juntos para traer a Cuba a Ramón Labañino, Antonio Guerrero, René González, Gerardo Hernández y Fernando González.
El evento concluido este sábado en Holguín, ciudad del nororiente cubano, reunió a casi 400 delegados con el objetivo de concebir las estrategias de trabajo encaminadas a lograr el éxito en una lucha por los Cinco -como se conocen en el mundo- que ya acumula más de 14 años.
Según contó a la prensa la coordinadora en Estados Unidos del Comité por la Liberación de los Cinco, Alicia Jrapko, ya están en marcha, con el concurso de compañeros de otros países, los preparativos para la segunda jornada Cinco días por los Cinco, que se realizará en Washington probablemente a fines de marzo. "Muchos amigos del mundo nos han confirmado su asistencia y ya estamos planificando esa jornada porque la primera fue efectiva, pero fue la primera, entonces a esta vamos a ponerle todo lo que aprendimos, pero sobre todo el corazón", aseguró.
El activista canadiense David Thomas, quien asiste al Coloquio por tercera ocasión, planea llegar a su tierra y rápidamente organizar la reproducción de unas etiquetas que concibió sobre el caso de los Cinco.
"Hace un tiempo hice el diseño y logré reproducir cierta cantidad en imanes, los cuales reparto para que la gente los pegue en su carro, en el metro, en autobuses, y así las personas ven mi mensaje en el tráfico, cuando se paran en un semáforo, cuando caminan por las calles", explicó.
María Cristina Bueno es una argentina que ha venido a Cuba diez veces y este es su primer coloquio, del cual se va impresionada por constatar tanta confraternidad en "una lucha de todos por la dignidad".
Ella comentó una idea que acaba de tener: hacer pequeñas publicaciones sobre determinados fragmentos del juicio contra los Cinco, detenidos en 1998 por investigar a grupos terroristas radicados en Miami.
"Decir que fue un juicio amañado y mentiroso es la imagen global, pero yo traduje al español todo lo sucedido en esos meses y los disparates, las barbaridades que encontré son enormes, entonces quiero extractarlas en forma pequeña y darlas a conocer porque en verdad indignan", señaló.
Por su parte, el militante comunista ruso Suraykin Maxim apuntó que su delegación vino para incluirse en un movimiento no solo por los Cinco, sino también por todos los pueblos que desean un mundo mejor.
En su país, agregó, organizan numerosas actividades en solidaridad con esta causa y con Cuba, y al venir al coloquio han podido intercambiar con gente de muchos países para hacer de todas una misma lucha.
En conversación con la prensa, la esposa de Gerardo Hernández, Adriana Pérez, consideró al Coloquio una excelente oportunidad para acoger en territorio cubano a las personas de otras naciones que ayudan en esta causa.
"Esos amigos -expresó- pagaron de su bolsillo y con sus recursos nuestros viajes a sus países para difundir el caso y sacrificaron su tiempo para dedicarlo a los Cinco, entonces es reconfortante poderles brindar nuestras atenciones en este Coloquio". (Prensa Latina)
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