Aunque por supuesto al multimillonario no le sucederá nada, Bill Gates y su fundación eugenista se enfrentan a un juicio en la India por probar vacunas de manera ilegal en niñas marginales. La lectura del despacho me dio pie para leer el informe anual Estado mundial de las niñas 2014. Se trata de un copioso dossier en formato PDF, con material informativo proporcionado por las Naciones Unidas y un sinnúmero de organismos a escala planetaria, consignador de cifras y elementos no manejados de forma usual en los medios. Por ende, quisiera compartirlo ─tanto cuanto permita el espacio, sin abotargar al receptor─ con nuestros lectores.
Una de cada tres infantes en el mundo subdesarrollado se casará antes de su cumpleaños número 18. Si no se hace nada para detener las tendencias actuales, para el 2020 más de 140 millones de ellas estarán desposadas. Esto es 14 millones cada año o casi 39 mil enlaces al día.
“El matrimonio infantil representa uno de los desafíos más urgentes de los derechos humanos y de desarrollo de nuestro tiempo. De las casi 70 millones de niñas-novias en el mundo, aproximadamente siete millones viven en África Occidental y Meridional. Es una violación a sus derechos básicos y afecta de manera profundamente negativa la trayectoria de su vida: acorta su infancia, limita sus oportunidades educativas y económicas, las somete a embarazos tempranos y de alto riesgo, las aísla socialmente e incrementa su vulnerabilidad a la violencia y a otras consecuencias perjudiciales para su salud. Sus consecuencias no se detienen en el nivel individual, al perpetuar la pobreza y la desigualdad de género a la siguiente generación, lo cual afecta a las familias, a las comunidades y a las naciones”, reza el material.
Alrededor del 25 por ciento de los hombres en Asia admite haber violado a una joven. Datos aportados por UNICEF al informe indican que 120 millones de jóvenes de menos de 20 años en el mundo fueron víctimas de abusos sexuales. La mitad de las agresiones se perpetran a menores de 16. Casi una de cada cuatro adolescentes de entre 15 y 19 años del planeta ─70 millones─ han sido víctimas de violencia física; cada diez minutos una fallece por ello.
Cada calendario aumenta en dos millones el número de niñas a quienes se les practica la extirpación del clítoris. La ONU estima que entre 130 y 140 millones en el mundo han sido objeto de tal operación en las 29 naciones de África y Oriente Medio donde está arraigada.
Geeta Rao Gupta, directora adjunta de UNICEF, sostiene que “"En gran parte del mundo, cerca de la mitad de las niñas cree que está justificado que un hombre golpee a su mujer o compañera bajo determinadas circunstancias, como por ejemplo si rechaza tener relaciones sexuales, si abandona la casa sin permiso, si discute, si descuida a los niños o si quema la cena". Algo remarcado desde el mismo prólogo del Informe por Alice Albright, la directora general de la Alianza Mundial por la Educación, cuando asevera que “En muchos sitios se les recuerda a las niñas y jóvenes que son menos valiosas que los niños y hombres. Son vulnerables al acoso sexual y a la violencia y obligadas a adoptar modelos de comportamiento y de éxito que se definen convencionalmente como “apropiados” para su género. Los niños y los hombres también son limitados por los conceptos de masculinidad que puede ser que no reflejen sus propios pensamientos, emociones y experiencias”.
“Aunque los Objetivos de Desarrollo del Milenio han tenido éxito en lograr que más pequeñas asistan a la escuela primaria, muchos países no alcanzan la paridad de género. Se proyecta que el 75 por ciento de las naciones la deberá haber conseguido en 2015 dentro de la educación primaria, mas solo el 56 en la enseñanza secundaria. Existen 65 millones de menores del sexo femenino que no asisten al colegio hoy día”, puntualiza el documento.
El texto aborda otro asunto significativo: “Los medios tienen una influencia cada vez mayor en las actitudes y en la reproducción de ideas entre los jóvenes. Lo informado por estos, la manera como se representa a las mujeres y niñas allí, tienen un efecto inconsciente en la forma de cómo los jóvenes se ven a sí mismos cuando se hacen adultos. El sexo vende, lo que significa que (…) presentan a muchachas escasamente vestidas y físicamente idealizadas. Se valora la apariencia de una joven más que su inteligencia, habilidad o gentileza. Como enfatizó Aidan White, Secretario General de la Federación Internacional de Periodistas, los medios en general están repletos de imágenes y cliché sobre las mujeres y niñas”.
Ello contribuye a fortalecer los eslabones de la cadena de sojuzgación femenina a nivel domiciliario, social. En algunas culturas patriarcales asiáticas su situación sobrepasa lo humillante. No solo los informes o los reportajes dan cuenta de ello; también la literatura y el cine, a través de obras impresionantes por la crudeza de lo descrito.
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