Yander tiró el juego de su vida este martes. |
Yander Guevara se adjudicó el triunfo desde el montículo al tolerar solo tres imparables y ponchar a seis rivales en nueve episodios de labor, mientras Juan Ramón Olivera cargó con el fracaso al admitir tres limpias en cuatro capítulos y dos tercios, en duelo efectuado en el estadio avileño José Ramón Cepero.
Los Tigres abrieron el marcador en el capítulo inicial en las piernas del jardinero José A. García, remolcado por conexión al campo corto de Ariel Borrero, y agregaron las dos definitivas en el quinto acto gracias a doblete de Raúl González que abrió las puertas de la goma a Yorbis Borroto y Andy Zamora.
Luego de caer en el primer partido de la ronda semifinal ante Granma con marcador de 9x2, el equipo de Ciego de Ávila supo responder con contundencia, apoyado en pitcheo efectivo y bateo oportuno, para sumar cuatro victorias en línea con pizarras de 16x5, 6x0, 9x4 y 3x0.
El seleccionado avileño garantizó así su presencia en la Gran Final del béisbol cubano por tercera vez en los últimos cinco años: en 2011 sucumbió frente a Pinar del Río en la discusión del título y un año más tarde abrazó la gloria al superar a Industriales.
Ciego de Ávila espera ahora por el ganador del otro duelo semifinal entre Isla de la Juventud y Matanzas, el cual marcha 3-2 favorable al elenco ultramarino y se reanuda esta noche en el estadio matancero Victoria de Girón.
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